ni que me digas que me quieres cada día
ni que estés pegado a mi las 24 horas
lo que yo quiero
-creo que ya te lo imaginarás-
es que sigas haciéndome sonreír con esa facilidad tan tuya
que consigas hacerme vibrar
y hacer que tire por tierra todo lo que digo
que hagas que tenga miedo
de que un día te marches
y estar segura de que haría cualquier cosa
con tal de que te quedaras
pero ni puedo prometerte esto
ni puedo decirte que es un contrato sin riesgos
porque los tiene, y son muchos
puede salir muy mal
o quién sabe, a veces las cosas
-sin ningún tipo de explicación-
salen bien por una vez
son excepciones
y joder, ¿no sería fascinante que tú y yo fuéramos la excepción?